Adiós a nuestra posibilidad de ser una metrópolis moderna con un sistema de transporte realmente integrado. Por mala gestión municipal e inacción del alcalde Muñoz, se suspenden los corredores complementarios a causa de la crisis total de este servicio público. Y mira que ya era difícil, sin metro subterráneo, sin trenes, pero han conseguido joder a los limeños aún más la vida. Seguimos retrocediendo. Y es posible que acabemos en la carreta.