Ya no saben qué hacer para menospreciar a Yalitza Aparicio, la protagonista de Roma. La última ha sido decir que nominar al Oscar a una actriz que no ha estudiado para actriz es discriminación positiva y una farsa. Alguna actriz mexicana se ha animado a decir que Yalitza será flor de un día para los caviares. No me importa que Hollywood lave sus culpas con Yalitza, ella no es obra de Hollywood, es obra de sí misma. Y su éxito, estoy segura, va a traer cosas nuevas.